Si te digo que nuestros antepasados dormían mejor que tú, aun teniendo colchones de calidad inferior, ¿me creerías? Espero que sí, ya que tiene una sencilla respuesta. Tu tatarabuela no tenía ni Facebook, ni Instagram ni Whatsapp. Estudios demuestran que usar el teléfono móvil antes de ir a dormir, altera el sueño, y no nos engañemos, todos miramos ese último vídeo o foto antes de cerrar los ojos.
Ante este comportamiento, estudios afirman que ir a la cama con un buen libro y leer un poco antes de conciliar el sueño, tiene grandes beneficios, como desarrollar una mayor capacidad de memoria, hablar mejor en público e incluso ordenarte la cabeza para al día siguiente estar mucho más despejado.
En Colchonería Cuesta recomendamos revivir los sueños de nuestros antepasados y dejar a un lado el teléfono.